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El gran Nabucodonosor es humillado

El poderoso rey Nabucodonosor pierde la razón.
Contribución de Richard Gunther
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Nabucodonosor era el rey de los babilonios y gobernaba el imperio más poderoso del mundo. Dios le había permitido ganar una batalla tras otra y llegar al poder para dar una lección al desobediente pueblo de Israel. Ahora los israelitas trabajaban como esclavos en su reino. Pero el éxito se le había subido a la cabeza a Nabucodonosor y era jactancioso y orgulloso. No quiso darle a Dios ningún tipo de gloria. – Número de diapositiva 1
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Entonces, una noche el rey tuvo un extraño sueño. – Número de diapositiva 2
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En su sueño vio un árbol muy grande. Era tan grande que su copa llegaba hasta el cielo y sus hojas se extendían por todo el mundo. – Número de diapositiva 3
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El árbol daba frutos que caían para alimentar a muchos animales. – Número de diapositiva 4
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Y entre sus enormes ramas habitaban numerosas aves diferentes. – Número de diapositiva 5
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Mientras el rey miraba el árbol, bajó un ángel y ordenó: "Derribad el árbol, cortad sus ramas, arrancad su follaje, desparramad su fruto; huyan las bestias que están debajo de él. Pero dejad en tierra el tocón con sus raíces, con ataduras de hierro y bronce alrededor de él". – Número de diapositiva 6
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El rey oyó al ángel hablar sobre él. "Que crezca la hierba sobre él, y que caiga la lluvia sobre él, y que viva como un animal. Vivirá como un animal durante siete años". Entonces, el ángel le dijo por qué le iba a pasar esto al rey. "Dios es todopoderoso, no tú. Aprenderás que Dios gobierna sobre la gente y tiene el control". – Número de diapositiva 7
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Cuando el rey despertó, ordenó a todos los sabios de su reino que acudieran a él. "Díganme qué significa mi sueño", exigió. Pero ninguno de los sabios, magos o consejeros pudo explicar lo que significaba el sueño del rey. – Número de diapositiva 8
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Entonces Daniel, que amaba, confiaba y obedecía a Dios, vino a ver al rey. "Sé que ningún secreto te es escondido", dijo el rey. "Explícame mi sueño". – Número de diapositiva 9
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Daniel pidió ayuda a Dios y luego esperó. Una hora después Dios le dijo de qué se trataba el sueño del rey. – Número de diapositiva 10
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Daniel volvió a dirigirse al rey. "¡Dime qué significa el sueño, aunque sean malas noticias!" <br />Daniel respondió: "Pues son malas noticias y tus enemigos se alegrarán". – Número de diapositiva 11
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"El árbol que viste eras tú. Fue cortado porque tú serás cortado. Y serás cortado a la medida durante siete años". – Número de diapositiva 12
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"Pero, ¿por qué ocurrirá esto?", preguntó el rey alarmado. <br />"Es porque eres malo y no tienes piedad con los pobres", respondió Daniel. "Estás inflado de orgullo y te crees más poderoso que Dios". – Número de diapositiva 13
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"Por supuesto", continuó Daniel, "si te arrepientes y haces lo correcto, Dios no te castigará". – Número de diapositiva 14
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Daniel salió de la presencia del rey y durante todo un año no pasó nada. El rey siguió siendo rico y sano. Su reino prosperaba y todo iba bien, hasta que un día estaba mirando su magnífico palacio y su corazón se infló de orgullo. – Número de diapositiva 15
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"Este es mi gran imperio", se jactó el rey. "Lo construí con mi poder. Soy poderoso. Mira lo importante que me he convertido". – Número de diapositiva 16
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No había terminado de hablar cuando se escuchó una voz que desde el cielo decía: «Éste es el decreto en cuanto a ti, rey Nabucodonosor. Tu autoridad real se te ha quitado.  Serás apartado de la gente y vivirás entre los animales salvajes.» – Número de diapositiva 17
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De inmediato, el rey Nabucodonosor perdió la cordura. – Número de diapositiva 18
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Abandonó su palacio y huyó al campo. Se volvió completamente salvaje. – Número de diapositiva 19
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El rey fue zarandeado por el viento... y empapado por la lluvia. – Número de diapositiva 20
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Sus uñas crecieron largas como garras de aves. Vivió como un animal salvaje durante siete años y luego volvió a recuperar su mente. – Número de diapositiva 21
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El rey Nabucodonosor había aprendido que Dios hace lo que Él quiere en el cielo y en la tierra. Nadie, ni siquiera un rey puede desafiarlo o cuestionar lo que hace. El Dios altísimo vive por los siglos de los siglos. Su reino no tiene fin. Él dirige a Sus ejércitos y a los pueblos de la tierra. – Número de diapositiva 22
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Volvió a estar sano y regresó al palacio. "Bendito sea el Dios Altísimo". – Número de diapositiva 23
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El rey Nabucodonosor ahora era un hombre más humilde y un gobernante mucho mejor debido a ello. Se dio cuenta de que era rey de Babilonia no por su poder sino porque Dios le había permitido lograrlo. – Número de diapositiva 24
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Escribió: "Ahora yo, el rey Nabucodonosor, alabo y exalto al Rey del Cielo. Todas sus obras son verdaderas y sus caminos justos. Y Él humilla a los que actúan con orgullo". – Número de diapositiva 25
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Número de diapositiva 26